Cepcolsa apoya el trabajo de investigación de la Fundación Omacha en pro de la conservación de los delfines, en el río Meta.
Entre los días 29 de agosto y 2 de septiembre, se realizó la décimo cuarta expedición de Estimación de Abundancia de Delfines de río, navegando en esta ocasión por el río Meta (Colombia). El punto de inicio del recorrido fue la población de Puerto Carreño, Vichada; y se finalizó en Puerto Gaitán, Meta. De esta forma, el grupo de investigadores de la Fundación Omacha, liderado por su director científico, Fernando Trujillo, navegó una distancia de 711 kilómetros aproximadamente.
En este trabajo se lograron 65 observaciones de delfín rosado (Inia geoffrensis), con un total de 134 delfines y un número reducido de crías. Los grupos en que se movían eran máximo siete (7) u ocho (8) individuos. En esta época del año, las aguas del río son altas y por esta razón los delfines estaban dispersos, opina la bióloga venezolana e integrante del equipo, Olga Herrera. Estos mamíferos son unos buenos indicadores del estado de salud de los ecosistemas acuáticos y la expedición fue testigo de este hecho.
En la parte baja del río, hacia su desembocadura en el río Orinoco, la densidad de individuos fue mayor que en la parte alta cercana a los Andes. Una razón para explicar esta situación es que los mayores asentamientos humanos, los proyectos productivos, los desarrollos agrícolas y las tendencias de sobrepesca se presentan hacia la zona alta. Los pocos delfines vistos en ese sector del río estaban en las confluencias de los ríos Cusiana, Cravo Sur, Manacacías y Casanare.
Los datos de esta expedición se analizarán y se compararán con los datos de la expedición del año 2006, y así se podrá determinar la variación de la cantidad de delfines en la zona. Así mismo, la expedición pudo encontrar otras especies de fauna, tales como aves acuáticas, entre ellos el garzón soldado (Jabiru mycteria); osos hormigueros (Myrmecophaga tridactyla) y venados cola blanca (Odocoileus virginianus).
Debido a las proyecciones y planes del gobierno nacional y del sector privado, en el eje río Meta – Orinoco, es fundamental continuar con el trabajo de monitoreo de las especies amenazadas y, en este caso, de los delfines de río para medir los impactos de algunos de los grandes proyectos que se planean para la zona.
Uno de estos planes, que ha estado en la agenda nacional en los últimos 30 años, es el dragado del río para permitir que sea navegable durante todo el año. Actualmente, sólo se puede navegar entre mayo y diciembre, y el tema productivo de esta región depende en parte de esta vía fluvial. El otro plan es la construcción de una carretera que comunique a Puerto Gaitán con Puerto Carreño, proyectada para el año 2017.
El equipo de trabajo de esta expedición estuvo conformado por los siguientes investigadores: Fernando Trujillo, Olga Herrera, Eugenia Escarria, Sindy Martínez, Erika Ortíz, el fotógrafo Lucas Jaramillo y el ayudante de campo Jacinto Terán.
Es importante aclarar que de la otra especie de delfín de río, el delfín gris o tucuxi (Sotalia fluviatilis), no se tiene registro en la Orinoquia colombiana. Esta especie se encuentra en los ríos Amazonas, Caquetá (abajo del raudal de Córdoba), Apaporís y Putumayo. Se ha mencionando la presencia del Tucuxi en el área de Puerto Carreño, pero no ha sido confirmada.
Desde el año 2006, la Fundación Omacha ha recorrido más de 8.000 Km., en los ríos más importantes de Colombia y Sudamérica, dentro del programa “Estimación de Abundancia de Delfines de río en Suramérica”.