La Fundación Oleoducto Vivo de ODL Bicentenario y la Fundación Omacha, en articulación con la comunidad y la Secretaría de Desarrollo Económico de Tauramena desarrollaron la Primera Feria del Moriche en la vereda Vigía Trompillos, municipio de Tauramena en el Casanare, el pasado 25 de agosto. Al evento asistieron 80 personas de la comunidad, provenientes de 46 predios del municipio.

¿Por qué el moriche?

El evento nace con el objetivo de concientizar a la comunidad de la importancia ecológica de la conservación de la palma de moriche (Mauritia flexuosa) en el ciclo del agua en los Llanos Orientales. Esta planta durante el verano es la responsable de generar reservas de agua de las que se abastecen animales y humanos en el periodo de sequía.

En esta feria se enfatizó no solamente la necesidad ambiental de la siembra y preservación de la palma de moriche, sino que además se mostraron las posibilidades para el aprovechamiento del fruto de la palma en la fabricación de artesanías y elaboración de harina y pulpa; base para la preparación de chicha, sorbete, tortas, postres, dulces, mermelada, arequipe, envueltos y galletas, entre otros. De igual manera, se evidenció la utilidad del fruto del moriche en la preparación de concentrado alimenticio para ganado y especies menores.

El evento contó con la presencia de Bibiana Caro, Directora Operativa de la Fundación Oleoducto Vivo, de ODL-Bicentenario, quien presentó a los asistentes los resultados de los diferentes programas que se han desarrollado en la región, en los que se han plantado, fertilizado y monitoreado más de 8.000 árboles, entre frutales y forestales, y se ha trabajado en la conservación de los esteros El Salero y los Patos; trabajos realizados en conjunto con la Fundación Omacha.

El presidente de la Junta de Acción Comunal, Jesús Roque, expresó su complacencia con la realización del evento y manifestó su intención de realizar en el 2020 la segunda versión, con más muestras del trabajo realizado por la comunidad.

La feria también contó con una muestra de artesanal elaborada con fibras provenientes de la palma de moriche traídos por la señora Elsa Colina, proveniente de la comunidad Wamonai (Arauca) quien llevó canastos, mochilas y sombreros. Doña Elsa hizo una demostración de cómo se realizan tejidos con la fibra obtenida de la hoja de esta palma.

La jornada estuvo amenizada por la presentación de un grupo de música llanera, y la exhibición de bailes tradicionales llaneros, a cargo de estudiantes del I. E. Centro Regional de Investigación, Educación y Extensión de Tauramena (CRIEET).